A medida que hacemos cada día todo lo posible para emprender el viaje a través de esta vida ajetreada y tratamos de vivir con un propósito y ser felices, todos pasamos por una constante lucha para encontrar momentos de paz, experimentando con más frecuencia momentos de estrés continuo que no nos permiten tener unos pocos momentos de paz.

Y cuanto más estamos expuestos al estrés, nos volvemos más susceptibles a muchas deficiencias de salud que a largo plazo pueden volverse más graves.

Muchos de nosotros usamos unas vacaciones para alejarnos de la rutina diaria y encontrar unos días de relativa paz para establecernos y energizarse y volver a nuestra rutina con más esfuerzo y eso está bien,

Pero ¿qué pasaría si pudiéramos reproducir esos sentimientos durante nuestra vida ajetreada habitual?

Cuando estás en esos lugares lejos de tu vida estresante normal y sientes paz y claridad en tu mente, es posible que sientas que ese es el lugar en el que te gustaría estar por el resto de tus días.

Pero la realidad es que quizás necesites volver a tu vida ajetreada habitual y quizás no estés en ese punto perfecto donde puedas experimentar la paz.

Sin embargo, hay formas en las que puedes aprender a encontrar algunos momentos de paz y silencio durante tu día normal que te ayudarán a disfrutar mucho más de tu tiempo.

Hacer un esfuerzo consciente para programar un tiempo para el silencio, la oración o la meditación todos los días te permitirá estar mucho mejor emocionalmente. Hay muchas personas que practican tener algo de tiempo para sí mismas y ven muchos beneficios.

Algunos dicen que dedicar el 10% de tu tiempo a la oración o la meditación te permite vivir una vida más feliz. Y cuando practiques esto, te sorprenderás de como te rendirá el tiempo y tendrás suficiente tiempo para todas tus tareas diarias.

Piensa en lo mucho que esto tiene sentido:

1. Comienza tu día eliminando el desorden de tu mente mientras te concentras en tu respiración, siendo agradecido y practicando el dejar ir de las emociones a las que no vale la pena aferrarse.
2. Eso te prepara para permitirte concentrarte en lo que necesitas hacer durante tu día. Eliminar todas esas distracciones de tu mente que no te permiten ser eficiente.
3. También te prepara para enfrentar los desafíos durante el día y discernir si vale la pena desviarse de tu objetivo o dejarse llevar y mantener el enfoque en el objetivo final.

Mantener nuestra mente y nuestro cuerpo funcionando constantemente sin algún tipo de descanso te llevará a sentir mucho más las cargas de la vida.

Pero si haces la práctica consciente de estar quieto y simplemente tomarte un tiempo para desconectarte por unos momentos al día verás una gran diferencia.

No tienes que estar en un lugar exótico para desconectarte por unos minutos u horas, puedes aprender a alcanzar esas emociones de paz donde sea que estés pero todo comienza con tu voluntad de escapar de tus rituales diarios por algún tiempo durante tu día.

Así que te animo a que programes un tiempo cada día para alejarte mental y emocionalmente de tu día a día y comiences a disfrutar de los muchos regalos que se te brindan en cada momento de tu vida.

E Luna