Escrito por Edgar Luna

A medida que llegamos a esta vida nos cuestionamos la razón por la que estamos aquí y a veces no entendemos y pasamos la mayor parte de nuestra vida buscando un propósito o tal vez simplemente tratamos de dejar pasar el tiempo.

Y a medida que pasamos más tiempo aquí en la tierra y adquirimos experiencia a través de eventos buenos y malos, almacenamos esos recuerdos en nuestra gran computadora que es nuestro cerebro,comienzan a ocupar espacio sin otro uso real que abrir uno de esos recuerdos de vez en cuando. y recordar buenos momentos que nos hacen sentir felices o abrir ese mal recuerdo que nos entristece o enoja.

A veces también los utilizamos para compartir nuestra experiencia con otros para intentar evitar que alguien más cometa un error similar al nuestro.

¿Cuántos de ustedes han pasado por algo significativo para ustedes y se lo guardan para sí mismos?

Podría ser porque crees que no es valioso para los demás o simplemente no estás interesado en compartir esa experiencia.

Sin embargo creo que debes estar abierto a la posibilidad de compartir el testimonio de tu vida y permitirle hablar con alguien.

Cada ser humano aquí en la tierra tiene una historia diferente que contar desde su perspectiva y puedo asegurarles que su historia es muy valiosa para alguien tal vez cercano a tí o para alguien que no lo es tanto.

Lo que creas que es importante para ti, eso que te apasiona, te animo a que lo compartas.

Podrías compartir con un familiar, amigo, colega a través de una charla, o tal vez eres más extrovertido y te gustaría compartir hablando en público o usando un medio que te permite tocar más corazones y ayudar a alguien con tu historia.

El mundo está lleno de millones de testimonios que pueden parecer similares, pero ninguno será idéntico al tuyo.

Hace muy poco tuve la bendición de hablar con una persona que compartió conmigo una experiencia difícil que tuvo con una enfermedad y cómo luchó para recuperarse. Cuando ella compartió esa experiencia conmigo y ví lo feliz que estaba de poder estar viva y disfrutando de la vida, inmediatamente me hizo pensar en alguien que conozco que está pasando por algo muy similar y usar este gran testimonio para darle esperanza.

Así que no te reprimas y cuando estés preparado para compartir tu testimonio, asegúrate de ser sincero contigo mismo y no intentes ser alguien que no eres.

A medida que pases más tiempo aquí en la tierra y ganes experiencia, no dejes que ese conocimiento se pierda, compártelo con alguien, escríbelo, haz un video, graba esa experiencia y nunca sabrás si el “Testimonio de tu Vida”  puede ayudar a alguien enfrentar algo que quizás tú ya  hayas experimentado.

E.Luna